Consecuencias de NO pagar la pensión alimenticia

En este artículo, te explicaremos de manera sencilla qué pasa cuando no se paga la totalidad de la pensión de alimentos que ha sido establecida por un juez. Para ayudarte a comprender mejor este tema, te presentaremos un caso práctico y explicaremos las leyes aplicables, sus implicaciones y las opciones disponibles para ambas partes involucradas.

Pero antes es necesario mencionar que la pensión alimenticia es una cantidad de dinero que una persona debe pagar regularmente para contribuir a los gastos de subsistencia y educación de sus hijos tras un divorcio o separación.

Esta obligación se establece judicialmente y está destinada a asegurar el bienestar económico del niño o los niños afectados. El monto y las condiciones específicas varían según las necesidades del niño y la capacidad financiera del padre o madre obligada a pagar.

Luís y Olga se divorciaron de mutuo acuerdo y, entre otras decisiones, se desarrolló que Luís debía pagar 500 euros mensuales para la manutención de sus dos hijos. Durante los primeros años, Luís cumplió con este acuerdo, pero luego comenzó a pagar solo la mitad debido a las responsabilidades financieras adicionales originadas por una nueva relación y un nuevo hijo. Ante esta situación, Olga decidió denunciar el incumplimiento de Luís.

El artículo 227 del Código Penal español clasifica el incumplimiento del pago de la pensión de alimentos como un delito de abandono de familia. Si una persona deja de pagar esta pensión durante dos meses consecutivos o cuatro meses no consecutivos, podría enfrentar una pena de prisión o una multa.

¿Es un delito pagar solo una parte de la pensión alimentaria establecida? Sí, especialmente cuando hay una intencionalidad clara de no pagar la totalidad, y los impagos son significativos en cantidad y duración. Es el juez quien evalúa la capacidad económica y la intencionalidad del obligado a pagar.

En el caso de Luís, aunque pagaba una parte de la pensión, no cumplía con el monto total acordado. Olga podía presentar pruebas de los impagos y, dependiendo de las circunstancias, el juez tomaría una decisión. Si Luís hubiera demostrado la incapacidad económica genuina y los esfuerzos para cumplir con sus obligaciones, podría haber evitado una sentencia condenatoria.

Es esencial que la persona obligada a pagar la pensión trate de ajustarse a la cantidad establecida por el juez. Si no puede hacerlo, debe solicitar oficialmente una modificación de la pensión y seguir pagando lo máximo posible, demostrando así su intención de cumplir con la obligación.

Además de la pena de prisión o multa, una condena penal por impago de la pensión de alimentos implica la obligación de saldar las cantidades adeudadas. Pagar la deuda antes del juicio penal puede reducir la pena. Además, una condena de este tipo resulta en antecedentes penales.

Existen varias sentencias judiciales que abordan el delito de impago de pensiones. Estas decisiones enfatizan que no se puede evitar el pago de la pensión de alimentos y que aquellos que enfrentan dificultades económicas deben solicitar una modificación judicial de la cantidad a pagar.

Si el alimentista (quien recibe la pensión) o el obligado a pagarla fallece, la pensión se extingue automáticamente.

Si el obligado a pagar la pensión sufre un declive significativo en sus ingresos o situación financiera, puede solicitar una modificación o suspensión del pago. No obstante, si el alimentista es menor de edad, la ley no permite la extinción completa.

Si el alimentista ha ingresado al mercado laboral y ya no necesita la pensión, se podría solicitar la extinción de la misma.

En ciertos casos, como cuando el hijo o hija ha roto la relación familiar de manera imputable a él o ella, podría justificarse la extinción de la pensión.

5.➜ Falta de Esfuerzos para Trabajar

Si el alimentista, siendo mayor de edad y capaz, no muestra esfuerzos para acceder al mercado laboral, esto podría ser motivo para la extinción.

Es importante mencionar que en el caso de pensión de alimentos en custodia compartida, la situación puede variar. Aquí, ambos padres tienen igual responsabilidad sobre el cuidado y bienestar del hijo, lo que podría afectar la necesidad o cantidad de la pensión.

No cumplir con el pago de la pensión de alimentos en España es un asunto serio que conlleva varias consecuencias legales. A continuación se detallan algunas de las sanciones que se pueden enfrentar.

En España, las multas por no pagar la pensión de alimentos pueden variar considerablemente dependiendo de factores como la cantidad adeudada y la duración del incumplimiento. En general, se podría enfrentar multas que van desde varios cientos de euros hasta miles de euros. La ley puede exigir el pago retroactivo de todas las pensiones adeudadas, además de las multas impuestas.

El Código Penal Español, en su artículo 227, establece que quien deje de pagar durante dos meses consecutivos o cuatro meses no consecutivos puede enfrentar una pena de prisión de tres meses a un año o multas de seis a 24 meses. La pena se determina en función de la gravedad del incumplimiento y las circunstancias personales del acusado.

Es fundamental destacar que el objetivo de la pena de prisión no es castigar al deudor, sino asegurar el cumplimiento de la obligación alimentaria. En este sentido, la cárcel se considera una medida de último recurso, a aplicarse cuando otros métodos para asegurar el cumplimiento han fallado.

El tema de la pensión de alimentos es complejo y lleno de matices legales. Si cree que alguna de las razones legales para la extinción de la pensión de alimentos aplica en su caso, es crucial que busque asesoramiento legal especializado para evitar problemas futuros. Cada caso es único, y es el tribunal el que tendrá la última palabra en estas situaciones.

Recuerde siempre actuar de acuerdo con la ley y buscar el bienestar de los hijos involucrados, ya que ellos son la prioridad en cualquier circunstancia relacionada con la pensión alimenticia.